REPU interviews: Juan Diego Rojas (REPUAtix '25)
- Nayeli Ballón Salcedo
- Aug 15
- 4 min read
Juan Diego Rojas: ""REPU es un espacio que valora el esfuerzo y el potencial, sin importar de dónde vengas".
Desde Tembladera, Cajamarca, Juan Diego Rojas, parte de la cohorte REPU Atix 2025, emprendió un viaje académico que lo llevó a desarrollar un proyecto que consistÃa en la utilización de biopolÃmeros y sus derivados, en el encapsulamiento de moléculas naturales o sintéticas en el Laboratorio de Investigación y Desarrollo de QuÃmica Orgánica (LIDQO) de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos (UNMSM). Su experiencia en REPU no solo fortaleció sus habilidades cientÃficas, sino que también redefinió su visión sobre el potencial de la ciencia peruana y su propio lugar en ella.
Su motivación para postular al programa nació de una curiosidad temprana: "Desde niño he sentido una gran curiosidad por entender cómo funcionan las cosas a nivel cientÃfico. Académicamente, buscaba una oportunidad que me permitiera desarrollar habilidades reales en un entorno de laboratorio. Al principio tuve dudas, especialmente por el temor a no estar suficientemente preparado. Sin embargo, decidà dar el paso porque sabÃa que serÃa una oportunidad transformadora".
Es sabido que hacer ciencia desde regiones fuera de Lima implica enfrentar múltiples desafÃos: acceso limitado a infraestructura especializada, escasa visibilidad de oportunidades y una brecha persistente en el reconocimiento del talento regional. Para Juan Diego, ser aceptado en el programa representó una oportunidad para ampliar sus horizontes cientÃficos. Al llegar a Lima, se enfrentó a un entorno nuevo, tanto en lo cultural como en lo académico, que al principio lo hizo sentir algo inseguro, pero fue gratamente sorprendido por la dinámica colaborativa del laboratorio: "Me encontré con un ambiente cálido. Eso me ayudó a adaptarme rápidamente. Me sorprendió mucho la disposición que tenÃan los investigadores para compartir su conocimiento".
Durante la pasantÃa, el mayor desafÃo fue la parte experimental del proyecto. La precisión de los procedimientos y la presión por obtener resultados significativos lo pusieron a prueba. Para enfrentarlo, nos comenta algunas de las estrategias que adoptó: "A veces los ensayos no salÃan como esperaba, y eso era frustrante. Para afrontarlo, elaboré un cronograma detallado y preparé guÃas metodológicas. Esa preparación previa me ayudó a mantener el control y adaptarme ante cualquier situación inesperada".
También resalta el acompañamiento de REPU como algo clave en su pasantÃa. Los mentores y jefes de rama no solo guiaron su trabajo, sino que también lo impulsaron a participar en espacios académicos como los Journal Clubs y Research in Progress: "Gracias a ellos pude participar con confianza y aprendà a expresarme con claridad ante un público académico. Este tipo de orientación marcó una gran diferencia en mi desarrollo personal".
Entre los recuerdos más memorables, Juan Diego comparte una anécdota con su compañero de laboratorio, Diego Quispe, también parte de REPU Atix. Una tarde, al terminar un experimento, se dieron cuenta de que eran los últimos en el laboratorio: "Nos tuvieron que dejar indicaciones detalladas de cómo dejar todo en su lugar y cerrar el laboratorio. Y asÃ, entre miedo y risas, salimos de la universidad." Esta escena refleja no solo la responsabilidad que implica la investigación, sino también nos recuerda la importancia de equilibrar el esfuerzo académico de manera que no afecte nuestro bienestar.
Al reflexionar sobre el impacto de la pasantÃa, Juan Diego no duda en afirmar que REPU contribuyó significativamente a su desarrollo personal y académico: "Esta experiencia me ha abierto la mente a nuevas formas de hacer ciencia, a pensar de manera más crÃtica y a trabajar con mayor disciplina. También fortaleció mi confianza, mi capacidad de comunicación en entornos académicos y mi motivación para seguir creciendo. Me voy con herramientas muy valiosas para mi futuro".
Además, la experiencia le permitió ver con mayor claridad el potencial de la ciencia peruana: "Es bien sabido que el peruano con su ingenio tiene mucho potencial para desarrollar ciencia, pero muchas veces ese talento no se visibiliza por falta de oportunidades. Programas como REPU son justo el impulso que se necesita para que ese potencial florezca".
Cuando piensa en el futuro, Juan Diego sabe que esta experiencia será un punto de referencia en su trayectoria: "Recordaré que fue mi primer paso hacia una carrera en la investigación cientÃfica. Fue la experiencia que me ayudó a descubrir mis capacidades, a confiar en mà mismo y a conectarme con una comunidad de personas que, como yo, creen en el poder de la ciencia para transformar realidades".
Finalmente, envÃa un mensaje a quienes aún dudan en postular, especialmente jóvenes de regiones fuera de Lima: "Las oportunidades no se piensan, las oportunidades se toman. A veces creemos que no estamos a la altura o que no tenemos las mismas oportunidades por venir de regiones fuera de Lima, pero eso no es cierto. Lo que realmente importa es la pasión por aprender y las ganas de aportar. REPU es un espacio que valora el esfuerzo y el potencial, sin importar de dónde vengas. Si te apasiona la ciencia y quieres crecer, este programa puede ser el impulso que necesitas. Atrévanse a intentarlo, porque vale la pena".
AUTHOR: NAYELI BALLÓN-SALCEDO

Nayeli nació en Cusco pero radica en Arequipa, Perú. Está estudiando BiologÃa en la Universidad Nacional de San AgustÃn (UNSA). A inicios de este año, formó parte de REPUAtix, realizando su pasantÃa en la Universidad Nacional Mayor de San Marcos en el Laboratorio de MicrobiologÃa Molecular y BiotecnologÃa. Actualmente es presidenta de la Sociedad CientÃfica de Estudiantes de BiologÃa – UNSA (SCIEB), organización recientemente fundada con el objetivo de proporcionar un espacio para que los estudiantes de pregrado produzcan y divulguen ciencia de alto impacto mediante la conformación de Semilleros de Investigación.
























